El principal problema asociado con el uso de botas de calle, o de nieve pero no de snowboard, es su construcción suave y flexible.
Si bien es posible encontrar botas de invierno con un tamaño que se ajuste a las fijaciones, debido a su suavidad, es probable que se aflojen e incluso se salgan de las fijaciones.
Sin el apoyo y sujeción correcto corres el riesgo de lesionarse.
Por el contrario, las botas de snowboard reales son lo suficientemente voluminosas con una base rígida para encajar cómodamente y con seguridad en las fijaciones.
La naturaleza rígida de las botas de snowboard también brinda el apoyo y el control necesarios para hacer giros cerrados en los parques de snowboard y terrenos para montar. Las botas aseguran que tus tobillos se mantengan rígidos y seguros a través de movimientos extremos.
Por el contrario, las botas normales son más flexibles y protegen mucho menos los tobillos y puedes llegar a lesionarte en una caida.
Los tobillos tienen una estructura ósea muy delicada que puede ser difícil de curar, por lo que un tobillo roto no es divertido. El uso de unas botas de snowboard adecuadas es un elemento de seguridad fundamental.
Lo importante de unas buenas botas de snowboard es que te proteja tanto estructuralmente como del frío. Además tienes que poder controlar correctamente la tabla.
Unas buenas botas de snowboard mejoran tu experiencia
Las botas de snowboard son muy personales. Si solo pudieras comprarte una pieza de material de snow sin duda recomendaría comprar un par de botas cómodas y que ofrezcan apoyo.
Las botas normales no ofrecen el apoyo correcto y creará mucha tensión en la zona de los tobillos, hasta causar dolor. Eso te arruinará tu experiencia.
En el caso de que tengas un pie muy grande y sientas que con unas botas de snowboard rozas la nieve, muchos fabricantes fabrican tablas de snowboard anchas.
Conclusión
Siempre usa botas de snowboard si quieres reducir las probabilidades de lesionarte.
No puedes usar botas normales para hacer snowboard, y si lo haces las probabilidades de lesionarte son altas.
El principal problema asociado con el uso de botas de calle, o de nieve pero no de snowboard, es su construcción suave y flexible.
Si bien es posible encontrar botas de invierno con un tamaño que se ajuste a las fijaciones, debido a su suavidad, es probable que se aflojen e incluso se salgan de las fijaciones.
Sin el apoyo y sujeción correcto corres el riesgo de lesionarse.
Por el contrario, las botas de snowboard reales son lo suficientemente voluminosas con una base rígida para encajar cómodamente y con seguridad en las fijaciones.
La naturaleza rígida de las botas de snowboard también brinda el apoyo y el control necesarios para hacer giros cerrados en los parques de snowboard y terrenos para montar. Las botas aseguran que tus tobillos se mantengan rígidos y seguros a través de movimientos extremos.
Por el contrario, las botas normales son más flexibles y protegen mucho menos los tobillos y puedes llegar a lesionarte en una caida.
Los tobillos tienen una estructura ósea muy delicada que puede ser difícil de curar, por lo que un tobillo roto no es divertido. El uso de unas botas de snowboard adecuadas es un elemento de seguridad fundamental.
Lo importante de unas buenas botas de snowboard es que te proteja tanto estructuralmente como del frío. Además tienes que poder controlar correctamente la tabla.
Unas buenas botas de snowboard mejoran tu experiencia
Las botas de snowboard son muy personales. Si solo pudieras comprarte una pieza de material de snow sin duda recomendaría comprar un par de botas cómodas y que ofrezcan apoyo.
Las botas normales no ofrecen el apoyo correcto y creará mucha tensión en la zona de los tobillos, hasta causar dolor. Eso te arruinará tu experiencia.
En el caso de que tengas un pie muy grande y sientas que con unas botas de snowboard rozas la nieve, muchos fabricantes fabrican tablas de snowboard anchas.
Conclusión
Siempre usa botas de snowboard si quieres reducir las probabilidades de lesionarte.